El gobierno luso ha aprobado una reforma del Código de Circulación que, en la circulación por glorietas, prohíbe ocupar el carril exterior, el de la derecha, salvo para abandonar directamente la rotonda en la primera o segunda salida. No hacerlo se multa con 300 euros. Además, esta reforma que entró en vigor a primeros de año, reduce de 0,5 a 0,2 g/l de alcohol en sangre la tasa máxima permitida a conductores profesionales y noveles.