La baja definitiva es el trámite por el que el titular de un vehículo comunica al Registro de la Dirección General de Tráfico que lo retira de la circulación definitivamente o lo transfiere a otro titular. Además de esta comunicación, el titular deberá asimismo proceder a la baja del vehículo en Hacienda, cumplimentando para ello el modelo 840. De no hacerlo, seguirá constando el vehículo en cuestión en situación de alta y el titular seguirá pagando por el mismo.