Después de pasar una comisión mixta paritaria, la sanción penal ha sido adoptada definitivamente en segunda lectura el 22 de julio por la Asamblea Nacional francesa y el 23 de julio por el Senado. Los Diputados han previsto una sanción penal, pudiendo llegar a aplicarse una multa de 15.000 euros a los clientes de empresas de transporte que se nieguen a aceptar la repercusión de la subida del gasóleo.
La publicación de la ley en el Diario Oficial Francés se realizará en las próximas semanas y su entrada en vigor será inmediata.